miércoles, 16 de abril de 2008

EN LA VARIEDAD ESTÁ EL GUSTO; PERO A VECES, EL DISGUSTO

Hay momentos en que a uno le cuesta no indignarse. Más de dos millones de personas siguen las tonterías que suelta el entrenador de la selección española. De fútbol, claro, que no hay otro deporte que merezca tanto interés. Cada uno malgasta su tiempo libre como le viene en gana, y ahí no puedo meter yo las narices; estaría bueno. Pero, la verdad, me produce tristeza que el balompié despierte tantas pasiones; sobre todo cuando hay mil problemas más importantes a la vuelta de la esquina. Debe ser aquello tan antiguo del pan y circo. O la triquiñuela tramposa de desviar la atención del personal, alejando de la opinión pública los asuntos verdaderamente importantes.

Sé que algunos dirán, oiga usted, que se trata de la selección que representa al país. Cierto, como asunto estatal interesa y debe ser tratado. ¿En hora de máxima audiencia? Quiero decir, que es posible que a los ciudadanos de seso inquieto, les interese todavía más que algún que otro juez se deje caer por el programita para atender toda una serie de inocentes preguntas sobre la marcha de la Ley en España; a lo mejor, quizás sería mucho más vital que nos explicasen por qué es tan fácil actuar de manera fraudulenta en los asuntos del hormigón; qué nos queda de nuestro precioso litoral; o por qué un país tan intrépido y viajero como este, desprecia el fenómeno inmigrante, y un largo etcétera, que me canso y me irrito.

No olvido, que como siempre, hacemos el ridículo. Este equipo, por lo que sea, cuesta más cuartos de los que cualquiera de mis compadres y yo pudiéramos juntar en toda una vida. Aunque pusiésemos todo nuestro ahínco, se lo digo de veras. Bueno, lo peor es el recochineo ¡Este señor, pidió que tuviésemos fe! Debería alguien recordarle cuantas veces ha prometido retirarse. Pero ¡Ay! El vil metal le llama demasiado. Será mejor esperar a que le echen, que así, seguro se embolsa jugosas cantidades monetarias.

Cambiando de tema, si se me permite, también me asaltan otros asuntos. El Chikilicuatre, creo que así es como se escribe, es a día de hoy la sensación. Personalmente, desencajo la mandíbula de tanto reír; es que pocas bromas se gastan como estas. Desde luego no me interesa si vive o muere Eurovisión. No soy de esos. Lo gracioso el que el Gran Wyoming, genial humorista de estas latitudes, se marca una tremenda parodia de la cancioncilla. Y, cual nocturnos acechantes, salen gentes que se sienten agraviadas por el mensaje. Por favor, en que país vivimos. Véanlo en Youtube y juzguen.

Por cierto, ¡viva la República! Otra cosa que merece reseña; y ya lo creo. Estoy seguro de que hace falta un día en el calendario, dedicado especialmente a recordar a los que cayeron por la legitimidad; de cualquiera que fuese su color, que los hubo de todos. Aunque, mejor soy cauteloso, que al final, con el caos que montaron ciertas gentes de las que mejor no me acuerdo, allá por el verano del año treinta y seis, cada cual tiró por su pelleja. De todas formas, como ciudadano, me honra el poder encontrar, en la historia de este secarral que llaman España, un oasis tan interesante. Desde luego, dignos del recuerdo fueron aquellos años; aun tan cerca en la memoria y sin embargo, generalmente olvidados ¡Viva la República!

Para finalizar, en este país de futboleros, me apunto al baloncesto, que por lo menos, así evito que me metan goles. Que para eso ya hay muchos espabilados. Será que me cae bien Gasol. Un saludo.

1 comentario:

XyTö_^^ dijo...

HABLANDO DE LA REPUBLICA, APARECIÓ UN BUZON PINTADO CON LOS COLORES DE LA REPUBLICA.LA VERDAD ES KE FUE UNA OBRA DE ARTE, LE KEDO MUY BIEN PERO CLARO TB DEPENDE DE KIEN LO MIRE AJAJAJA.

yo siempre me kedare con el futbol, soy muy futbolero y ayer me alegre mucho de ke ganara el Valencia.En cuanto al chikilicuatre ese, me parece bien, Eurovisión es una coña de toda la vida y como es una coña y un cachondeo ganará el más friki y el mas cachondo osea el chiki chiki...

Un saludete tio!!